Para el mantenimiento diario, utilice una bayeta húmeda y jabón líquido neutro o un desengrasante doméstico (en spray o líquido). En caso de manchas difíciles, use un estropajo (del tipo 3M Scotchbrite blanco) y un detergente o un limpiador con base de amoníaco para superficies duras.
Sólo cuando se trate de una mancha realmente difícil o de un arañazo ligero, es conveniente frotarlos con un estropajo, utilizando un producto blanqueador (lejía).

Cada vez que un producto químico esté en contacto con la superficie, deberá aclararla con agua. En el caso de manchas secas, primero se ha de eliminar el material residual con cuidado utilizando un rascador de plástico que no esté afilado.

Luego se ha de limpiar la superficie con una bayeta y limpiador líquido no abrasivo, que no contenga lejía, y finalmente se ha de aclarar con abundante agua.

No coloque sartenes ni ollas calientes, ni ningún aparato de calentar, directamente sobre la superficie. Evite que los objetos pesados o afilados golpeen la superficie.

Use agua o un limpiador con base de amoniaco para limpiar inmediatamente las manchas, y después aclare la superficie con agua.

Los pequeños arañazos de la superficie, las manchas de café y las quemaduras de cigarrillo se pueden eliminar con un estropajo Scotchbrite.

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